Alegria para pocos. Desazón y "a seguir luchando" para muchos.
El fin del mes de junio se nos viene encima, y consigo la despedida del FUTBOL JUVENIL de los jugadores nacidos en el año 1991. Algunos, los menos, han logrado firmar su primer contrato. Para ellos nuestras felicitaciones por el logro obtenido. Debe ser muy satisfactorio este momento, al cual hay que disfrutarlo y prepararse para trabajar cada día más. Pero para otros, la mayoría, llegó el momento en que han quedado en libertad de acción por sus Instituciones. Como en tantas cosas de la vida, no todo lo que reluce es oro. Más allá de los jugadores millonarios, famosos, que son contundentemente los menos, hay una camada enorme de luchadores, de trabajadores del fútbol. De esos que no brillan en la TV, que no son "objetos de culto", que no tienen autos de alta valuación, a los que no lo rodean mujeres tan hermosas como codiciosas... pero que son tan merecedores o más de reconocimiento que aquellos exitosos.
En estos días varios jóvenes que han recorrido tenaz y pacientemente cada una de las divisiones, desde el fútbol infantil hasta la angustiante cuarta división, han recibido la noticia de su libertad de acción, y es lógico que la primera reacción sea de impotencia y frustración. Pero también es justo remarcar que seguramente, de seguir luchando, nuevas puertas pueden abrirse. Es cuestión de buscarlas, rodearse de gente honesta (aunque muchos no lo crean en el fútbol todavía la hay), mostrarse y golpear esas puertas. Alguna se abrirá y podrán seguir haciendo lo que les apasiona, que es ni más ni menos que jugar a la pelota. A muchos chicos los conocemos, del día día, de las interminables pero apasionantes tardes de inferiores. A muchos otros no. Pero para todos ellos nuestra palabra de aliento, a seguir luchando. Hay mucho por andar... No lo duden ni un instante.
Leonardo Perales. 24-6-2012.
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